Dolores: Cómo fue egresar en pandemia de la escuela de la cárcel
Diecisiete estudiantes obtuvieron su título secundario, incluido uno que siguió la ceremonia desde su casa, luego de haber recuperado la libertad.
Todas las escuelas tuvieron un año difícil, con exigencias muy fuertes derivadas de las circunstancias que impuso la pandemia. Todas las escuelas, en estos días, están llevando a cabo sus actos de egreso, tanto para los chicos que terminan la primaria como para aquellos que completan la secundaria. Pero esta ceremonia tuvo especiales características en una escuela muy particular, la que funciona dentro de la cárcel de Dolores.
En el CENS Nº 452 “Expedición Atlantis”, según su denominación oficial, obtuvieron su título secundario 17 estudiantes privados de su libertad. Incluido uno que ya desde hace unos meses la había recuperado pero decidió continuar el año escolar desde su casa.
La ceremonia tuvo las restricciones que imponen los protocolos: los egresados y el mínimo necesario de profesores, así como el director del Penal y el asistente educativo. Si bien suelen ser el momento inapreciable del encuentro con los familiares, esta vez hubo que suplirlo con la tecnología: el acto fue trasmitido por Facebook y de este modo lo pudieron seguir familiares, profesores y, por supuesto, el egresado que está en libertad.
El director de la escuela, Germán Castellá, relató para Entrelíneas.info cómo fue estudiar desde la cárcel en medio de la pandemia. “Hicimos módulos que se subieron a un sitio de internet y otros se imprimieron. Yo iba todas las semanas al penal y hacía de nexo entre los alumnos y los profesores”, explicó.
Prácticamente todos los estudiantes tenían celulares y fue a través de estos dispositivos que pudieron seguir sus clases. “Luego también organizamos videoconferencias con los profesores desde el SUM de la escuela, con los bancos y mesas separados y dialogando con el profesor desde la pantalla”.
También virtualmente lograron mantener algunos proyectos que la escuela lleva adelante desde hace muchos años como una exposición comercial y la realización de un libro de cuentos colectivo. A estas clases también se conectó el alumno que no quiso dejar de estudiar en la escuela “Expedición Atlantis” y obtener el título del secundario el título del secundario. El director de la Escuela relató que recibió una conmovedora carta de la madre del joven, con palabras de agradecimiento para todos los profesores.
“Es que, como dijo en un encuentro uno de los alumnos, para ellos la escuela es la calle”, sintetizó Castellá al explicar la importancia del estudio para quienes están en prisión.