De acuerdo con Sturzenegger, la conexión aérea sería posible gracias a la reciente desregulación del sector aéreo comercial, que permite operar vuelos con aviones pequeños de baja capacidad, sin tantas trabas burocráticas. El uso de aeronaves con capacidad para 10 a 19 pasajeros hace viable conectar ciudades del interior que no cuentan con suficiente demanda para aviones de mayor tamaño.
“Es una locura que tengas ciudades en Argentina como Olavarría, Tandil, Roque Sáenz Peña, Las Lomitas, que no tengan conexión aérea. Claro, si pedís que vaya un (Boeing) 747 nadie lo va a hacer, pero en un avión de 19 o 10 plazas sí”, señaló el ministro.
Según se argumentó, la falta de conectividad aérea para ciudades intermedias es una deuda que la nueva política de desregulación podría subsanar. Ciudades como Tandil, que contaba con vuelos regulares, quedaron desconectadas de la red aérea nacional debido a los altos costos operativos y la baja demanda para aeronaves de gran capacidad. La nueva iniciativa busca restablecer esa conectividad con aeronaves más pequeñas, optimizando costos y atendiendo las necesidades de transporte de estas regiones.