Pila: violaron a una joven que promueve la denuncia de casos de abuso y acoso sexual
Tiene 24 años y ya había sufrido un abuso sexual agravado. El día anterior a ser violada había anunciado desde una cuenta de Instagram colaborativa que comenzarían a difundirse testimonios de víctimas.
Mariana Larrea, una joven de 24 años que reside en Pila, denunció haber sido víctima de una violación el pasado 21 de junio en el distrito en el que vive desde hace 12 años. Mariana es la creadora de “Hablemos” (@podemoshablar.ahora), un perfil de Instagram colaborativo que promueve y difunde la denuncia de casos de abuso y acoso sexual en la Región: “Queremos hablar de las cosas que pasan en los pueblos y lo tapan”.
La cuenta de Instagram se creó hace poco más de un mes con la participación de 5 ó 6 personas, según contó Mariana en un video posterior a la violación. “El objetivo era poder darle voz a las víctimas porque yo también estuve en el lugar en el que no podía hablarlo con nadie. Compartir los testimonios y poder comenzar a sacar afuera la mierda que hay acá en Pila. En la página pasaron muchas cosas…. Y cuando se puso que se iba a empezar a prestar los testimonios de las víctimas sobre las autoridades, al otro día a mí me pasa lo que me pasa”, relató la joven que es Técnica en Emergencias de Salud.
En otro video que subió en varias partes a la misma red social, Mariana contó que la violación se produjo cuando volvía a su casa, luego de visitar a un amigo que vive del otro lado de la plaza de Pila. Allí, fue interceptada desde atrás por dos personas, una de las cuales le cubrió la cabeza con una bolsa y un cordón, mientras la otra la golpeaba en el estómago para impedir que gritara. “Después me golpearon la cabeza contra una pared y ahí perdí un poco la conciencia”, relató.
Luego, atada de pies y manos, la arrastraron dos cuadras hasta llegar a Circunvalación, que es la última calle de Pila, una zona oscura y sin cámaras de vigilancia. “Ahí me tiraron a una zanja y comenzaron a torturarme. Me sacaron la ropa y me cortaron el abdomen con cuchillos, con vidrios y rasguños. Después, uno me bajó la calza y la bombacha y como me resistí, me hizo cortes en los muslos. El tipo agarró un tubo de vidrio y me lo insertó en la vagina, varias veces, demasiadas veces. Pero no le bastó y también me lo metió por el ano, lo cual produjo un desgarro. Como yo seguía resistiéndome, me hacía cortes en las piernas”, prosiguió.
Mariana contó que el que le había puesto la bolsa en la cabeza le aflojó el cordón porque pensó que se moría. Más tarde llegó un auto al que se subieron los dos hombres. “Me dijeron que si seguía con esto iba a terminar muerta. No pude ver quiénes eran, me quedé inmóvil porque no encontraba mi teléfono, mis cosas”, indicó la joven pilense, que dijo que el traumático episodio terminó a las 2:00 de la madrugada.
Mariana fue encontrada en la zanja por un grupo de jóvenes. "La policía solo pasó por el lugar sin bajarse del patrullero”, aseguró quien como ejemplo de la inacción policial reveló que no se sacó fotos del lugar donde fue violada. También dijo que el precario médico (certificado del estado general de salud de una persona respecto de la presencia o ausencia de lesiones recientes) que se realizó a las 5 de la mañana fue incompleto. "En la guardia me sacaron el tubo que aún tenía en la vagina y sólo hicieron el examen vaginal y anal, sin tomar fotos de mis heridas en el cuerpo", mencionó.
El agravante para la situación que padeció Mariana es que ella ya había sido víctima de otro abuso sexual agravado. “Mi caso no se tomó muy en serio: solamente lo hicieron la subsecretaría de género y la Comisaría de la Mujer”, expresó. “Hace 3 meses denuncié y se rompieron las medidas restrictivas… Fui y denuncié ante la Fiscalía Nº 10 de Chascomús a cierto policía, que no puedo dar su nombre, porque no estaba haciendo su labor. La policía muchas veces no hizo bien su trabajo”, agregó.
En uno de los 5 posteos que realizó para contar su desgarradora experiencia, Mariana confesó que “vivo con miedo todos los días” y se preguntó “¿por qué las personas que tienen que cuidarnos no lo hacen?”. Sin embargo, aseguró que ese miedo no la hará abandonar su lucha por terminar con el abuso y acoso sexual que padecen tantas mujes, algo que impulsa desde la cuenta de Instagram “Hablemos”. “La página va a seguir: no hicimos nada malo, sólo expusimos a los abusadores y acosadores con pruebas. No vamos a darla de baja porque creemos que tiene un fin muy positivo”, enfatizó Mariana.