Juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa: la Fiscalía solicitó perpetua para los 8 imputados
Consideró que todos los acusados participaron de igual manera en el asesinato. También pidieron que Juan Pedro Guarino y Tomás Colazzo sean procesados por falso testimonio.
“Todos pegaron, todos hicieron todo”. De esta manera, la Fiscalía sintetizó la actuación de los 8 imputados en el crimen de Fernando Báez Sosa y justificó el pedido de prisión perpetua para Máximo Thomsen, Lucas, Luciano y Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Blas Cinalli, Matías Benicelli y Ayrton Viollaz.
El fiscal Juan Manuel Dávila pidió también el procesamiento por falso testimonio para Juan Pedro Guarino y Tomás Colazzo, dos amigos de los imputados. El fiscal Gustavo García inició la ronda de alegatos buscando establecer las bases para calificar el hecho como “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”.
Para ello proyectó los vídeos que se fueron viendo durante el desarrollo de las audiencias pero de manera sincronizada, de modo que se fuera viendo la secuencia desde que comenzó el ataque. De esta manera, fue incluyendo a cada uno de los acusados en la golpiza, indicando que “todos pegaron”.
García justificó la alevosía en el estado de indefensión de la víctima, a raíz de lo que describió como una emboscada “desde varios flancos”.
En cuanto a la premeditación, aclaró que en el derecho argentino no existe el homicidio premeditado sino en concurso con premeditación, y que por ello la jurisprudencia establece que no es necesario un gran plan o mucho tiempo de premeditación.
En esa línea, sostuvo que los vídeos permiten establecer que existió un período de 7 minutos antes de comenzar el ataque, en el que los acusados esperan el momento oportuno para actuar. “Siete minutos para acordar matar a Fernando”, dijo.
Por otra parte, el fiscal destacó que, más allá de “la fascinación por los videos”, se contó en las audiencias con 23 testigos presenciales que ubicaron con claridad a los acusados en la escena del crimen, atacando todos ellos tanto a Fernando como a sus amigos.
Dávila, por su parte, habló de la participación de cada uno de ellos, analizando las contradicciones de las declaraciones de los acusados que hablaron frente al tribunal. También pidió que se inicie una causa por falso testimonio contra Guarino, que en un principio estuvo detenido y luego fue sobreseído en la causa, y contra Colazzo, otro de los amigos del grupo de agresores.