Hace unos días la historia de Eva, una jubilada de 91 años de San Miguel, se viralizó gracias a un video de los vecinos que filmaron mientras los operarios de Edenor le cortaban la luz por no pagar una factura de 26 mil pesos. Y era obviamente un error de la empresa. Ahora se suma Marta, una jubilada municipal de Rauch, paciente oncológica, que tiene que pagar 16 mil pesos por un error del medidor de Edea.
Marta Ofelia Caballero Petriz vive en las afueras de Rauch, donde no llega el gas natural ni el agua de red. Ni siquiera tiene asfalto o cordón cuneta. Trabajó toda su vida como empleada municipal y subsistió los últimos años por una pensión graciable que cobraba su marido. El cambio de gobierno le trajo malos augurios: ni bien le “salió” la jubilación –la mínima, 7 mil pesos-, el beneficio que le tocaba a su marido –un peón rural sin aportes ni derechos reconocidos- dejó de llegar, según informó Infocielo.
Esta semana, le llegó la boleta de luz de EDEA con un monto de 16 mil pesos, a pagar en dos cuotas. El consumo del mes se disparó: ella no pagaba habitualmente más de 350 pesos, porque tiene tarifa social. Cuando fue a reclamar, la distribuidora notó algo raro y confirmó más tarde que había un error en el medidor. No obstante, le avisaron, a la boleta la tenía que pagar igual. Eso sí, le podían hacer un plan de pagos.
Parece increíble, pero una boleta de 16 mil pesos no configura la peor parte del problema de Marta. Es que, como es paciente oncológica, los médicos le prohibieron que use las salamandras con las que calefaccionó su hogar toda la vida, con lo cual usa gas envasado, que cuesta más de 20 pesos por kilo.
La concejal de Rauch de Unidad Ciudadana, María Lamarche, viralizó la situación de Marta a través de su muro de Facebook, que llegó a todos los medios.