La Justicia condenó por primera vez y con varias cadenas perpetuas a los responsables de los vuelos de la muerte, el sistema de exterminio de los detenidos desaparecidos que acabó con la vida de unas 4.000 personas, lanzadas al mar desde aviones militares.
Al cabo de las tres horas y 50 minutos que duró la lectura de la sentencia del mayor juicio de la historia de Argentina, la llamada megacausa de la ESMA, con 54 imputados por los delitos cometidos contra 789 víctimas, fue finalmente histórica y determinó la condena a cadena perpetua de 29 implicados, incluidos algunos de los más conocidos represores, ya condenados por otras causas. Hubo 6 absoluciones y el resto fueron condenados a penas entre 8 y 25 años.
El Tribunal Oral Federal Nº 5 condenó al ex oficial de la Armada, Alfredo Astiz, a prisión perpetua por considerarlo coautor de los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada por ser funcionario público durante la última dictadura militar en la Argentina.
También fue sentenciado el ex jefe de tareas del Grupo de Inteligencia, Jorge “Tigre” Acosta. La pena máxima también les llegó a Adolfo Donda, apropiador de la diputada nacional Victoria Donda, y otros represores conocidos, como Antonio Pernías y Ricardo Miguel Cavallo, quienes ya cumplían otras condenas por delitos de lesa humanidad.
Entre otros crímenes, a Astiz se lo juzga por la desaparición de la adolescente sueca Dagmar Hagelin, baleada en la calle en febrero de 1977 y desde entonces desaparecida. Y también por la causa de la desaparición seguida de muerte de la monja francesa, Léonnie Duquet, junto a las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo: Azucena Villaflor de De Vicenti, Esther Ballestrino de Careaga, Ángela Aguad y María Ponce de Bianco. Las amas de casa se reunían en la Iglesia de la Santa Cruz, en el barrio porteño de San Cristóbal, para diagramar la búsqueda de sus hijos y allí fueron engañadas por el ex marino que se infiltró con el nombre falso de Gustavo Niño, un supuesto hermano de un desaparecido.
En agosto de 2005, a partir de una investigación de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata, el Equipo Argentino de Antropología Forense identificó los restos de las mujeres desaparecidas en diciembre de 1977 que estaban enterradas como NN en el cementerio de General Lavalle, luego de haber sufrido los siniestros “Vuelos de la Muerte”, el operativo de la dictadura militar que consistía en arrojar adormecidos al mar o al Río de La Plata a prisioneros que luego aparecían sin vida en las playas de las localidades del Partido de La Costa, en especial en la zona de Santa Teresita y Las Toninas.
Durante su declaración ante el tribunal, Astiz negó todo arrepentimiento por los crímenes cometidos en la ESMA. “Los organismos de Derechos Humanos son grupos de persecución y venganza. Nunca voy a pedir perdón”, declaró desafiante.
QUIENES FUERON ABSUELTOS
Por otra parte, el tribunal absolvió al ex secretario de Hacienda de la dictadura, Juan Alemann, uno de los acusados civiles que fue juzgado en la causa más abarcativa (por cantidad de imputados, victimas y hechos juzgados) de la historia de la justicia argentina, ya que incluyó a 68 imputados en 2012 pero que se redujeron a 54 por muerte o razones de salud y que fue sufrido por 789 víctimas.