Casi feliz: secretos desconocidos de la exitosa serie de Netflix que protagonizan Sebastián Wainraich y Natalie Pérez
Durante diez capítulos, la nueva serie de Netflix se destaca por el humor y las buenas actuaciones. Acá te contamos historias de cómo se filmó y más allá de lo que se ve en pantalla.
Casi Feliz, la comedia que Netflix estrenó este viernes 1 de mayo está llena de méritos. Acaso la primera de ellos sea que al momento de imaginarla y posteriormente escribirla, Sebastián Wainraich decidió hacer algo bien distinto a todas las series argentinas hechas para Netflix o la televisión tradicional.
Dirigida por Hernán Guerschuny (en cine ya trabajó con Wainraich en Una noche de amor), son diez capítulos de menos de 30 minutos con el protagonismo de Wainraich en una obra que saca brillo al mejor humor del actor y conductor radial.
En la serie, Sebastián tiene características similares a las de su vida real, pero obviamente que no es autobiográfica. En el elenco estable también se destaca su compañera, Natalie Pérez, siempre fresca y que a sus 33 años hace de ex pareja de Wainraich y madre de mellizos de 9.
La serie, cuya pegadiza cortina la canta Miranda! y fue escrita por Ale Sergi, fue filmada entre marzo y el 30 de abril del año pasado. A las 7 de la mañana arrancaba el rodaje y a las 16 aproximadamente terminaba ya que Wainraich durante esos dos meses no dejó de realizar Metro y Medio, el programa de radio donde es acompañado por Julieta Pink y Pablo Fábregas, quienes también tienen participación en Casi Feliz.
Los actores invitados es una de las patas fuertes de la serie. Todos cumplen, pese a que esas participaciones no sean en algunos casos más allá de un par de escenas. Así pueden verse, entre varios otros, a Dalia Gutmann (esposa de Wainraich en la vida real), Juan Minujín, Adrián Suar, Julieta Díaz, Gustavo Garzón, José Luis Gioia, Emme, Wos, Sebastián Presta, Carla Peterson, Pilar Gamboa, Mex Urtizberea, Inés Efrón y hasta el propio Hernán Guerschuny.
Suar tenía una hora y media para grabar las dos escenas, pero lograron sacar adelante la situación. Wainraich ya piensa en una segunda temporada, que si el éxito continúa será inevitable. Para ello, ya tiene el sí de Natalie Pérez y la intención de varios actores a sumarse a estas participaciones: Mercedes Morán y Federico D’Elía ya pican en punta.
Con mayor participación que los invitados, cumplen un gran rol cada vez que aparecen dos grandes de la actuación nacional: Hugo Arana y Adriana Aizemberg, que hacen el papel de padres de Wainraich. También participan Rafa Ferro, Benjamín Amadeo y Peto Menahem, a quien su papel de hermano de Sebastián le queda pintado.
Como en la vida real, Sebastián y Peto lucen también en Netflix esa química que hace que todo marche sobre rieles cada vez que comparten escena. Desde canciones que Peto improvisa hasta esa escena caminando por unas lomitas, filmada en Puerto Madero.
En la serie participa también Luca Martin, el hijo de Matías Martin y Nancy Duplaá, que además participa en la radio. También actúa Lucas Wainraich, sobrino de Sebastián devenido en operador de la radio de ficción. En ese mundo se destaca Sombrilla (Santiago Korovsky), productor en la radio y el fiel compañero del protagonista.
La escena más complicada, coincidieron ambos protagonistas fue una decisiva que se da en el epílogo de la temporada, en la casa de Pilar, el personaje de Pérez. Hay un “homenaje” a la película Volver al Futuro y una escena final que homenajea a la serie favorita de Wainraich: Mad Men. Y hay, esperan quienes disfrutaron de esta comedia, una segunda temporada en ciernes.